Daniel Botero es un estudiante de economía de la Universidad que nos ofrece una mirada interesante de una realidad que por estos días todos extrañamos.
«Hace unos años había aprendido la técnica del acuarela pero no la había desarrollado muy bien. Siempre quise pasar al papel mi fascinación de los espacios y edificios de la universidad. Siendo así, unas semanas después de empezar la cuarentena y las clases virtuales, vi que tenía mucho tiempo libre.»
Daniel Botero
Daniel nos presenta su versión del paisaje uniandino. En sus pósters de acuarela nos regala tal vez una vista que dimos por sentada antes de la pandemia, un paisaje que se convirtió en nuestro propio espacio, donde nos sentimos nosotros mismos y aprendimos a ser quienes quisimos ser.
«Eso sumado a la nostalgia que me causaba no poder volver al campus, me hicieron tomar cartas en el asunto y hacer mi primera acuarela de la universidad.»
Daniel Botero
Entendió el sentimiento que a todos nos causó el no poder volver al campus y su fascinación por el paisaje se convirtió no solo en un escape para la nostalgia, sino una oportunidad de emprendimiento. Como buen estudiante de economía estudió la situación y vio el provecho que podía sacarle. Pues como él mismo lo comenta, trabajar en las acuarelas no solo se convirtió en una actividad lucrativa, sino que lo ayudó a organizar su tiempo y a equilibrar sus actividades priorizando lo necesario.
Daniel es un ejemplo para todos, él es la muestra viva de que el artista no es sólo el que estudia sino el que trabaja y se esmera por su obra. Un futuro economista que encontró en los paisajes de Los Andes un complemento a su carrera y encontró en el campus el sentido de pertenencia y amor por el trabajo que lo llevó a estas maravillosas obras.
Si bien comenta abiertamente que no se conforma solo con un área de estudios, tiene una idea clara y entiende que su futuro se forma con la convergencia de factores diversos que él mismo define. No es sólo el arte y no es sólo la economía, es el gusto por lo que hace y el espacio que la universidad le dio para explotarlo al máximo.
El artista economista que nos devolvió en este tiempo de pandemia una mirada al campus que extrañamos. Logró encontrar un punto intermedio entre su pasión y su carrera para surgir de una manera extraordinaria. Daniel es un caso para resaltar y para la registrar, pues además de las acuarelas trabaja con nuestra memoria. Memorias valiosas que atesoramos en el BADAC, visiones y manifestaciones de artistas que lanzan su trabajo al público.
Daniel plasma a su manera la visión de ese campus que nos abrió las puertas y que nos dio todas las oportunidades de ser lo que quisimos ser en un espacio seguro.
Imagen destacada
Panorámica Universidad de los Andes, Daniel Botero (24 de mayo del 2021). Fuente: Behance Daniel Botero.
Referencia
Entrevista de María José Correales a Daniel Botero, mayo del 2021.